El español, que tuvo que abrir pista tras dos pinchazos de Ekström, llega a las tres últimas jornadas con más de 20 minutos y 33 segundos sobre Loeb
Carlos Sainz: «Queda mucha carrera, hay que ir día a día»
Una etapa menos y misma situación de carrera. Esa es la mejor noticia que pueden recibir cada día Carlos Sainz y Lucas Cruz en su defensa del liderato del Dakar 2024 y eso es exactamente lo que han hecho hoy camino de Al-Ula, en una especial rápida de 428 kilómetros en las que las diferencias han sido mínimas.
La pareja española ha perdido apenas 4:14 sobre Loeb, una distancia ínfima teniendo en cuenta que Audi abría pista con sus tres espadas mientras que Loeb partía por detrás y con la necesidad de arriesgar. Fruto de ello se lleva la victoria de etapa (ya van cuatro en este Dakar) pero un botín escaso en la general.
Eso sí, Loeb también ha tenido su sustito hoy, esta vez en forma de pinchazos: «Hemos tenido dos en la mitad de la etapa que nos ha obligado a aflojar al final para no tener un tercero», explicaba. Quizá eso le haya privado de abrir una mayor brecha, pero el caso es que esos 20 minutos son la barrera que deberá derribar en los dos próximos días: «La diferencia aún es grande pero quedan tres etapas, así que… vamos a seguir apretando».
Estrategia (casi) perfecta
Como se esperaba, Audi paró inmediatamente a Peterhansel para escoltar a Sainz y lanzó a Ekström por delante para marcarles una referencia. La táctica funcionó bien hasta que el sueco acumuló dos pinchazos y tuvo que levantar el pie para no quedarse sin ruedas de recambio.
Entonces, el mando pasó a Sainz y Cruz… y ahí comenzaron algunos pequeños agobios: «Al final ha resultado una etapa super estresante dentro del coche por la complicación de la navegación una vez que hemos alcanzado a Mattias». Pero la pérdida de tiempo no es grave, y eso llena de optimismo al madrileño: «Estoy contento, teniendo en cuenta que he abierto bastante tiempo. Hemos pasado un día más», decía en meta.
Sainz impuso un ritmo alto, pero sin correr riesgos inútiles, lo que acaba de explicar la distancia obtenida por un Loeb que no tiene más remedio que forzar la máquina. Además del resultado, la buena noticia para Sainz es que mañana de nuevo tendrá cerca a Peterhansel, que saldrá seis minutos después del madrileño… y debería ser Loeb el que cediera tiempo.
Al-Attiyah no levanta cabeza
No está siendo el Dakar de Nasser Al-Attiyah. El catarí, que cambió el Toyota por el Hunter tras proclamarse por segunda vez Campeón del Mundo de Rally Raid ha tenido que volver de nuevo por carretera al campamento de Al-Ula.
Después del problema de motor de ayer, su Hunter -con un nuevo propulsor- se volvió a parar… ¡¡en el primer kilómetro!! Esta vez con la dirección asistida (otro punto débil del coche británico que, de hecho, ya avisó en el mismísimo shakedown con una fuga en el sistema).
Al-Attiyah vuelve a abandonar la prueba aunque tendrá una segunda opción de reengancharse… y ya solo le queda otra más antes de agotar sus jokers.
