Luego de las expresiones del sumo pontífice sobre la unión de parejas del mismo sexo, desde la cúpula eclesiástica salieron a aclarar las versiones.
El aval que el papa Francisco les dio a las uniones civiles de parejas del mismo sexo, tal como mostró un documental, levantó polvareda, por lo que este lunes el Vaticano salió a aclarar que esas palabras fueron sacadas de contexto y editadas, por lo que no referían «a la doctrina de la Iglesia».
En una carta enviada desde la Secretaría de Estado del Vaticano a los representantes papales de todo el mundo, la Santa Sede asegura que dos comentarios hechos por el Pontífice en el documental «Francesco», del estadounidense de origen ruso Evgeny Afineevsky, que fue estrenado en agosto en Roma, fueron sacados de contexto.
«Hace más de un año, durante una entrevista, el papa Francisco respondió a dos preguntas, en dos momentos diferentes, que en el mencionado documental fueron editadas y publicadas como una sola respuesta sin la debida contextualización, lo que ha generado mucha confusión», señala un documento interno del Vaticano, filtrado a la prensa por varias nunciaturas.
La nota citó las palabras del Sumo Pontífice, quien en 2014 explicó que «el matrimonio es entre un hombre y una mujer», pero en el documental se cortó una frase donde Francisco decía que «es una incongruencia hablar de matrimonio homosexual». El documento también aclaró que «es evidente que el Papa se refirió a determinadas disposiciones estatales, no ciertamente a la doctrina de la Iglesia, numerosas veces reafirmada en el curso de los años».
En ese contexto, el Vaticano argumentó que el Papa «había hablado sobre los derechos de estas personas a tener cierta protección legal», pero no sobre el matrimonio entre personas del mismo sexo. La Secretaría de Estado también explicó que las declaraciones de Francisco «generaron confusión» debido a que el director del documental editó en una sola respuesta las diferentes opiniones dadas en una entrevista concedida a Televisa, en 2019, que había sido censurada.
«Una pregunta sucesiva era, en cambio, inherente a una ley local de hace diez años en Argentina sobre los matrimonios igualitarios de parejas del mismo sexo y a la oposición del entonces arzobispo de Buenos Aires al respecto», asegura la carta.
Fuente: Crónica
