Los vecinos se quejaron. Ahora vivirán en San Vicente, un barrio sin los lujos de Villa Morra.
Los vecinos del edificio Tierra Alta de Villa Morra decidieron organizarse para pedirle a la gerencia que adelantara la rescisión unilateral del contrato de Edgardo Kueider y su secretaria Iara Magdalena Guinsel Costa. El consorcio se impuso y la pareja debió abandonar el departamento 103 del complejo habitacional, ubicado en uno de los barrios más lujosos de Asunción.
Tras ser notificados, la defensa de Kueider solicitó al Ministerio Público y al juez Humberto Otazú que ambos fueran reubicados en un dúplex del barrio de San Vicente, sobre la calle Félix Bogado, una zona popular de la capital. El pedido tuvo el visto bueno del magistrado y, a partir de hoy, la pareja cumplirá arresto domiciliario bajo la supervisión de la comisaría 14° Metropolitana.
El exsenador, aliado del presidente Javier Milei, había sido detenido en Paraguay por intentar ingresar con más de 200 mil dólares y 600 mil pesos sin declarar el pasado 4 de diciembre. Kueider y su acompañante, Costa, fueron descubiertos por agentes de la Dirección Nacional de Ingresos Tributarios (DNIT) y Migraciones en el puesto fronterizo del Puente de la Amistad, en Ciudad del Este, departamento de Alto Paraná.»Nuestro defendido ha sidonotificado de la intención de rescisión anticipada y unilateral del contrato de locación,motivándolos esta decisión en una solicitud del consorcio de propietarios del edificioTierra Alta del Maestro», se lee en la resolución firmada por Otazú, juezde delitos Económicos y Anticorrupción. Cabe mencionar que el fiscal Ysrael Villalba Ramírez no se opuso alo solicitado por la defensa de la pareja.
Sobre Kueider y Costa existe un pedido de extradición sin resolver. El recurso fue realizado por el Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional Nº 1 de San Isidro, de la provincia de Buenos Aires, vinculado a la causa FSM 18007/2024, caratulada: «Denunciado Kueider, Edgardo S/ Enriquecimiento Ilícito». La solicitud fue recepcionada por la Dirección de Cooperación y Asistencia Judicial Internacional de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) de Paraguay a principios de este año.
Tras ser notificados, la defensa de Kueider solicitó al Ministerio Público y al juez Humberto Otazú que ambos fueran reubicados en un dúplex del barrio de San Vicente, sobre la calle Félix Bogado, una zona popular de la capital
Pero días después, la fiscal adjunta Matilde Moreno, interina de la Unidad Especializada de Asuntos Internacionales, rechazó el pedido de extradición porque no se ajustaba a lo establecido en los tratados internacionales. Moreno llegó a señalar presuntas «contradicciones» que generaban sospechas sobre el objetivo real de la solicitud de la jueza federal argentina Sandra Arroyo Salgado.
«La mención genérica de convenciones internacionales genera confusión en cuanto a su aplicación y podría afectar el encuadre jurídico del caso», decía el escrito de Moreno, al tiempo que exigía arrimar la documentación requerida vía Cancillería.
En tanto para la defensa del exsenador, liderada por el abogado Ricardo Preda, existen dos caminos para su cliente: acatar al pedido de extradición o litigar en contra de cualquier resolución no favorable para Kueider y Costa por parte del juez de Garantías Rolando Duarte, quien cayó sorteado para atender la causa por tentativa de contrabando.
Mientras los trámites administrativos e investigativos siguen su curso, la pareja investigada por supuestamente capitalizar empresas de portafolio en la zona de frontera -la Fiscalía paraguaya maneja la hipótesis de lavado de dinero- deberá continuar con la medida de arresto domiciliario a la espera de la extradición o bien de su liberación.