La Corona Española, al igual que el resto de las realezas del mundo, afronta diversos desafíos en un contexto de crisis global y de grandes guerras que azotan al mundo. En este marco, se conoció que un miembro de la realeza padeció dos duras enfermedades: cáncer de mama y Alzheimer.
El familiar de la realeza que tiene este diagnóstico es Irene, la princesa de Grecia y hermana de la reina emérita Sofía. Incluso, luego de hacer públicas estas enfermedades, la monarca se habría hecho cargo de gran parte del cuidado de su familiar, a quien le tiene un especial aprecio.
La noticia acerca de un alzheimer que puede ser calificado como avanzado debido a la gravedad de la enfermedad de la princesa fue dada a conocer públicamente en octubre de 2023. El cáncer, en tanto, data del 2002. Por este último padecimiento recibió un tratamiento de quimioterapia y logró superarla.
La reina emérita de España y su hermana Irene han mantenido un vínculo profundamente cercano a lo largo de toda su vida y su recorrido como representantes de distintas realezas europeas. Desde su infancia han compartido diversos intereses que, según trascendidos, serían actividades y conocimientos como la arqueología y la música.
Luego del exilio de la familia real griega en 1967, Irene, tras un viaje a la India junto a su madre, se estableció en españa con su hermana Sofía y comenzó a residir en el Palacio de la Zarzuela. Desde ese entonces compartieron una vida cotidiana alejada del protocolo real, lo que fortaleció aún más su vínculo.
El diagnóstico de Alzheimer de la princesa Irene fue un cimbronazo para gran parte de la Corona Española, sobre todo para su hermana. Esto, además, ha marcado un punto de inflexión en su vida pública y redujo significativamente sus apariciones y sus compromisos sociales.
Irene históricamente fue catalogada como un integrante discreto de la realeza, aunque siempre se mostró conectada con su hermana Sofía. Solía participar con frecuencia en eventos culturales, conciertos y actos oficiales de perfil bajo.