La habitación de al lado, elegida como mejor película en el Festival de Venecia, se estrenará en la Argentina el 31 de octubre; Nicole Kidman no pudo recibir el premio a la mejor actriz por el fallecimiento de su madre
Pedro Almodóvar se llevó este sábado 7 de septiembre en Venecia uno de los mayores triunfos de su extensa e ilustre carrera. La habitación de al lado, la primera película hablada en inglés del director español, ganó el León de Oro, el premio más importante del 81° Festival de Cine de Venecia, decana de las grandes muestras cinematográficas del calendario anual.
La decisión del jurado encabezado por la actriz francesa Isabelle Huppert sorprendió a varios observadores, que imaginaban la coronación de alguna de las dos protagonistas de La habitación de al lado, Julianne Moore y Tilda Swinton, como mejor actriz. En los pronósticos, la película de Almodóvar tenía chances firmes en la búsqueda del premio mayor, pero aparecía siempre por debajo de las dos grandes favoritas, The Brutalist, del estadounidense Brady Corbet, y April, de la georgiana Dea Kulumbegashvili, que de todas maneras ganaron, respectivamente, el León de Plata al mejor director y el Premio Especial del Jurado.
El momento más emotivo de la ceremonia de clausura, realizado en el atardecer del sábado, se produjo cuando Huppert anunció que Nicole Kidman había ganado la Copa Volpi a la mejor interpretación femenina de Venecia 2024 por Babygirl, thriller erótico que exigió de la actriz una de las actuaciones más audaces y extremas de toda su carrera. Fue Halina Reijn, la directora de la película, quien subió al escenario para recibir la distinción en nombre de la ganadora. Kidman había regresado a Venecia con la idea de estar presente en la entrega de premios, pero debió viajar en forma urgente por el fallecimiento de su madre.
Con la estatuilla en la mano, Reijn leyó el siguiente mensaje de Kidman: “Hoy llegué a Venecia y me enteré poco después de que mi valiente y hermosa madre, Janelle Ann Kidman, acaba de morir. Estoy en estado de shock y tengo que estar con mi familia. Pero este premio es para ella. Me formó, me guió y me hizo. Estoy más que agradecida de poder decir su nombre a todos ustedes a través de Halina. La colisión entre la vida y el arte es desgarradora. Mi corazón está roto”.
El único reconocimiento al cine latinoamericano en el cuadro de honor de Venecia 2024 fue para Murilo Hauser y Heitor Lorega, ganadores del premio al mejor guión por la película brasileña Ainda Estou Aquí (I’m Still Here), de Walter Salles, inspirado en la desaparición del ex diputado Rubens Pavia a manos de la dictadura que gobernaba Brasil en 1971. La película ya se instala en el primer plano de la futura competencia por el Oscar internacional y tiene un enorme puntal en su protagonista, Fernanda Torres, que también apareció entre las candidatas a mejor actriz en Venecia. El jockey, de Luis Ortega, la única película argentina de las 21 que participaron este año de la competencia oficial por el León de Oro, se fue de Venecia con las manos vacías.
Almodóvar cerró con su gran triunfo una semana arrolladora en Venecia. La primera proyección de su película para el público concluyó con una interminable ovación de 17 minutos, y a partir de ahora el premio coloca a La habitación de al lado en un lugar privilegiado en el comienzo de la gran carrera en busca de los premios más importantes de Hollywood.
El León de Oro es el primer premio que el director manchego gana por una de sus películas en el mapa de los festivales europeos más importantes. Lo recibió cinco años después de llevarse, también en Venecia, el León de Honor a la trayectoria. Y a propósito de reconocimientos por una carrera entera, recibirá el próximo jueves 26 el premio Donostia que otorga cada año el Festival de San Sebastián a los méritos de toda una vida dedicada al cine. Un día antes, Almodóvar cumplirá 75 años (nació el 25 de septiembre de 1949).
La habitación de al lado, basada en la novela Cuál es tu tormento, de la autora estadounidense Sigrid Nunez, ya tiene fecha confirmada de estreno en los cines de la Argentina para el 31 de octubre. Curiosamente, para ese mismo día se anuncia la llegada a las salas de nuestro país de Anora, de Sean Baker, la ganadora de la Palma de Oro del último Festival de Cannes.
“Me gustaría dedicárselo a mi familia, que está aquí ahora –dijo Almodóvar en inglés, al iniciar sus palabras de agradecimiento, con el León de Oro en su regazo-. La habitación de al lado es mi primera película en inglés, pero el espíritu es español”. Y de inmediato pidió permiso al público para continuar con su discurso en nuestro idioma. Lo primero que hizo fue agradecer a Moore y Swinton, y decir que el premio les pertenece a ellas. “Uno de nuestros privilegios como director –precisó- es que somos el primer testigo cada vez que ocurre un milagro ante la cámara. Y ellas convocaron ese milagro durante muchos días”.
Y prosiguió con palabras muy parecidas a las que usó en la conferencia de prensa del lunes pasado, en defensa de la eutanasia. “El film habla de una mujer que agoniza en un mundo agonizante. Y de la persona que decide compartir con ella sus últimos días. Acompañar a un enfermo terminal, saber estar a su lado, es una de las grandes cualidades que poseemos las personas. Despedirse de este mundo limpia y dignamente es un derecho fundamental, no político sino humano. Sé que atenta contra cualquier credo que tiene a Dios como única fuente de vida. Les pediría a los practicantes que respeten y no intervengan en decisiones individuales. El ser humano debe ser libre para vivir y morir cuando la vida resulte insufrible”, expresó el director manchego.
La gran sorpresa de un festival que dejó completamente huérfanas de premios a películas tan poderosas como Guasón 2: Folie Á Deux. de Todd Phillips, y Queer, de Luca Guadagnino, fue el Gran Premio del Jurado para Vermiglio (Bermellón), de la joven directora italiana Maura Delpero, relato coral sobre la vida en un pueblo de montaña de la península durante el último año de la Segunda Guerra Mundial, al que llega un soldado desertor. “Empezó y terminó como un sueño. Tengo una hija de pocos meses y le dedico este premio por aguantar a su mamá directora. Conciliar el trabajo y la familia es muy difícil, sobre todo cuando ese desafío recae sobre las mujeres”, dijo la realizadora.
The Brutalist y April, los dos títulos más comentados de toda la competencia oficial y por extensión del festival mismo, ganaron premios que estaban por debajo de las expectativas de muchos observadores, pero a la vez ganaron protagonismo para instalarse de aquí en adelante en una muy buena posición con vistas a la temporada de premios. April se enfoca en la vida de una médica que practica abortos clandestinos en una zona rural de Georgia y es una película, de acuerdo a quienes la vieron, que no ahorra concesiones al espectador. Muestra, entre otras fuertes imágenes, la secuencia completa de un parto que no sale bien y otra similar sobre un aborto clandestino, ambas en tiempo real y con la cámara fija.
The Brutalist quedará, según los testimonios de quienes fueron testigos de su estreno mundial, como la experiencia más imponente de toda la muestra. No solo por su duración (tres horas y 35 minutos) sino por las características de su rodaje (se filmó en celuloide y en 70 mm), su producción y las ambiciosas búsquedas visuales y narrativas del relato. El protagonista es un arquitecto europeo (Adrien Brody) que huye del nazismo y se instala en Estados Unidos para iniciar una nueva vida a las órdenes de un mecenas de conducta extraña y despótica que le hace un encargo destinado a superar todo lo que se construyó hasta ese momento.
A lo largo de todo el festival se habló de Brody como un candidato casi sin rival posible para llevarse la Copa Volpi al mejor actor, pero el jurado finalmente concedió el premio al francés Vincent Lindon por la interpretación en Jouer Avec le Feu (Playing With Fire), de las hermanas Delphine y Muriel Coulin, de un padre viudo que se enfrenta a la creciente identificación de uno de sus hijos con un partido de ultraderecha. El aplaudido protagonista de El precio de un hombre recibió su premio con un discurso interminable que incluyó cuatro agradecimientos en continuado a su compatriota Huppert como presidenta del jurado oficial.
La última gran estrella presente en Venecia 2024 fue Kevin Costner, que antes de la premiación presentó fuera de concurso y en estreno mundial la segunda película del proyecto cinematográfico más importante y ambicioso de toda su carrera, el western Horizon, An American Saga. Costner reconoció que la primera película de las cuatro planeadas “no fue un éxito abrumador” y admitió que, por esa falta de repercusión, el lanzamiento de la segunda película sufrió retrasos.
Pero a la vez se mostró confiado e inmune a los tropiezos que enfrenta su ambiciosa saga para ser estrenada en los cines. “He hecho muchas películas de ese estilo, que finalmente resistieron la prueba del tiempo. Cuando hay algo que esperas de una segunda parte, te das cuenta que de que la segunda siempre se vuelve más difícil que la primera. Con la tercera pasa lo mismo. Además, es difícil ir al Oeste. Solo diré esto: el capítulo tres de Horizon va a ser devastador”, dijo durante el encuentro con la prensa internacional.
Y agregó: “Tengo que apresurarme y no dejar que la roca caiga cuesta abajo. Tengo que volver a poner mis manos sobre ella y volver a empujarla hacia arriba. Es una cuerda que no puedo soltar. No sé cómo voy a hacer la tercera película de Horizon ahora mismo, pero la voy a hacer”, dijo con la voz algo vacilante por la emoción.
Después de su estreno mundial en el Festival de Cannes, la primera parte de Horizon llegó a fines de junio a los cines de los Estados Unidos, casi toda Europa y Brasil, sin la respuesta de público esperada por Warner, el estudio encargado de su lanzamiento en todos esos territorios. En nuestro país hubo un fallido anuncio inicial (y oficial) por parte de la plataforma Max en relación con su lanzamiento directo vía streaming el 9 de agosto y una posterior rectificación hecha a las apuradas cuando se comprobó que no estaba disponible en la fecha anunciada. Desde allí luego se indicó que el lanzamiento había sido postergado “sin fecha”.
Según pudo saber LA NACION, todavía existe alguna posibilidad de que Horizon, An American Saga, capítulo 1 pueda ser vista en pantalla grande, ya que la distribución sigue estando en manos independientes. Mientras tanto, Max ya la incorporó a su catálogo en los Estados Unidos y está disponible allí online desde el mes pasado.
LA NACIÓN