El director iraní Jafar Panahi, que estuvo en prisión y le prohibieron filmar películas en su país, acaba de ganar el máximo galardón del Festival de Cine de Cannes.
Panahi, de 64 años, recogió la prestigiosa Palma de Oro por su película «It Was Just an Accident» (Sólo fue un accidente), descrita por la BBC como «un thriller de venganza furioso pero divertido que apunta a los regímenes opresivos».
Panahi fue ovacionado cuando instó a sus compatriotas iraníes a «dejar a un lado» las diferencias y los problemas.
«Lo más importante ahora es nuestro país y la libertad de nuestro país», dijo. «Unamos nuestras fuerzas. Que nadie se atreva a decirnos qué tipo de ropa debemos llevar, qué debemos hacer o qué no debemos hacer».
La última vez que Panahi estuvo en prisión, de la que fue liberado en 2023, fue por protestar contra la detención de dos compañeros cineastas críticos con las autoridades.