Bruce Willis atraviesa una de las etapas más difíciles de su vida. El ícono del cine de acción, famoso por su rol en Duro de Matar, enfrenta desde 2022 una dura batalla contra la demencia frontotemporal, una enfermedad neurodegenerativa que avanza sin freno. A sus 70 años, según trascendió en medios internacionales, el actor ya no puede hablar, caminar ni leer.
La noticia generó conmoción entre sus fans, quienes lo recuerdan por su carisma, versatilidad y su inconfundible presencia en pantalla. Si bien su familia mantiene la discreción, fuentes cercanas aseguran que su estado se ha deteriorado de forma progresiva y que su día a día requiere cuidados constantes.
El primer signo fue la afasia, un trastorno del lenguaje que lo obligó a retirarse de la actuación. Desde entonces, su esposa Emma Heming y sus hijas asumieron un rol clave en su cuidado y visibilización del cuadro. A través de redes sociales, comparten campañas informativas, reflexiones personales y formas de acompañar a pacientes con esta condición.
“Él siempre fue nuestra roca. Ahora nosotras lo somos para él”, escribió Heming en uno de los tantos posteos que emocionaron al público.
En abril de este año, su entorno había asegurado que se encontraba “estable”, aunque el panorama cambió. Hoy, Bruce requiere asistencia constante y su vínculo con el mundo se sostiene a través del amor de su familia.
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La demencia frontotemporal afecta áreas del cerebro asociadas con la personalidad, el comportamiento y el lenguaje. Su avance es lento pero inevitable. No hay tratamiento curativo, solo herramientas para aliviar síntomas y sostener el bienestar emocional del paciente.
Además de la imposibilidad de comunicarse verbalmente, Willis habría perdido la movilidad y ya no puede leer. Es un cuadro que remueve fibras sensibles, sobre todo en quienes lo vieron durante años interpretando a héroes invencibles.
En medio de este difícil proceso, la familia de Bruce busca transformar el dolor en conciencia, para que más personas conozcan esta enfermedad y acompañen a quienes la sufren. Mientras tanto, millones de fans en todo el mundo le envían fuerza al eterno John McClane.
