El Muñeco analizó el nivel del Millonario en su vuelta y valoró el nivel del líder del torneo local como medida para lo que viene: la ida con Talleres. «Necesitamos jugar mejor, pero que durante esa búsqueda todos tiren para el mismo lado», definió.

Marcelo Gallardo intentó este sábado, después del empate 1-1 con Huracán en su reestreno en el banco de River, mantener flotando en el ambiente la mística que lo acompañó durante los años de oro de su ciclo anterior. Y, en la tranquilidad que emanó de su presencia en la conferencia de prensa post partido, pareció lograrlo al mostrarse convencido de que, con tiempo de trabajo, el equipo recuperará el nivel que le faltó, por ejemplo, para no sufrir ante el líder de la Liga Profesional.

«Fue una semana bastante dinámica, de muchos cambios, con cambio de entrenador, partidos en poco tiempo por jugar y pocos días de entrenamiento. En definitiva, creo que jugamos con un muy buen equipo, Huracán es un equipo muy bien trabajado que sabe lo que quiere. Tuvimos 22 o 25 minutos en los que pudimos imponer nuestro juego, con disposición a ser un equipo agresivo, que intentara promover un ataque a través de la recuperación. Hicimos el gol, podíamos haber hecho el segundo y a partir de ahí empezamos a bajar. El equipo estaba acostumbrado a jugar de una manera distinta y nos costó, empezamos a ser imprecisos también producto del rival que nos llevó: estaba bien agrupado, preparado para recuperar y salir rápido de contragolpe. También tuvo sus chances y su posibilidad de ganarlo, nos encontramos con un buen rival. Está bueno que haya pasado eso porque nos va a preparar para el partido de Copa, al esfuerzo que hicieron los jugadores hoy hay que tratar de llevarlo a una mayor cantidad de minutos posible», resumió el DT sobre un tema recurrente de la charla: la visita del miércoles a Talleres por la ida de los octavos de la Libertadores.

Sobre las sensaciones sobre su regreso, el Muñeco hizo hincapié en haber tomado el mando a mitad de un proceso: «De movida es un gran desafío para mí, todo el cuerpo técnico, los jugadores y dirigentes. Yo dije que el tren ya está en marcha y nosotros nos subimos, en pocos días tenés que preparar el mejor equipo posible para la competencia que ya se está jugando y se aproxima un partido de copa. Eso significa de ida y vuelta, con mucha lucidez para jugarlo. Hay que estar enfocado en esta eliminación de 180 minutos. Ya sabíamos adónde nos íbamos a subir, intentar darle la información a los jugadores sobre a qué queremos jugar. Eso significa tener mucha precisión y que asimilen rápidamente el concepto, es difícil cambiar tanto. A veces hasta puede no ser bueno, ahí tenemos que ser puntuales y específicos, es una de las cosas que vamos a tener en cuenta».

«Son métodos diferentes, en cuanto a lo físico el equipo va a responder en la medida que vaya asimilando entrenamientos y tenga la posibilidad de mejorar en algunos aspectos. Intentamos esa gestión de esfuerzos, ser un equipo más agresivo y más físico, porque tengo un equipo que juega bien y son buenos técnicamente, tenemos que intentar gestionar esa parte para que nos lleve a dar un paso adelante sin sufrir demasiado. No tenemos mucho margen porque hay que jugar ya, pero tengo fe y creo que eso lo vamos a sacar. Tenemos una posibilidad ya de enfrentarnos hoy a un muy buen Huracán, es una buena medida para el partido que viene. Con un rival de otras características no nos hubiéramos podido acercar a lo que va a ser el miércoles. Lamentablemente no pudimos ganar en el reencuentro con nuestra gente y nuestro estadio», amplió.

En cuando a la buena energía que otorga la confianza, el entrenador fue luego más allá: «Creo mucho en cómo nos vinculamos con eso, hacemos un deporte de equipo, cuando conformamos un equipo queremos que eso vaya hacia un lugar donde creemos todos que tenemos que ir, y si algo lo impide tratar de corregirlo. Y si creemos que no lo podemos conseguir nos podemos confundir. Tenemos que tener claridad en lo que queremos, hacia dónde queremos ir, por eso necesito la energía de todos. Que cada uno ponga su granito de arena, cuando flota eso en el aire está buenísimo. Hablé de recuperar un espíritu de equipo, que contagie y el hincha se sienta representado. Necesitamos de eso, jugar mejor, que el equipo se encuentre y fluya, que los jugadores estén a tope, pero durante esa búsqueda necesitamos que todos tiren para el mismo lado, que tengamos esa conexión para ir por esa ruta, contagiarnos entre todos. Que de adentro contagiemos afuera y de afuera vuelva adentro, pero de la buena. Tiene que suceder y confiamos en que va a ser así».

La emotividad del regreso ante su gente
Gallardo no dejó pasar la chance de mostrar gratitud por el cariño del público y reconocer la emotividad de la velada: «Muchas emociones también, quiero agradecerle a la gente por el cariño, por cómo alentaron, cuando el equipo estaba necesitado ellos estaban apoyando, hubo una energía buena. Vamos a intentar agarrarnos de eso sin que el empate de hoy nos baje un poquito la ilusión, eso no tiene que pasar, tenemos que prepararnos para lo que viene». Y repasó: «Fueron muchísimas imágenes que se me pasaron por la cabeza, mucho desde lo sentimental que me une a la institución. Fue mi primer partido con el estadio a pleno, sus nuevas tribunas y la gente que acompaña de una manera muy especial. Mi familia estaba en el estadio, movilizada, parte de mi familia porque no estaban todos. Intenté sobrellevarlo de la mejor manera, no es fácil cuando tenés esa emoción a flor de piel».

La lista de la Copa y la competencia en el plantel
«Lamentablemente en esta lista final de Copa teníamos que elegir a estos cinco jugadores y el resto se iba a quedar afuera, elegimos a los que están en lista. En algunas posiciones hay una competencia bien marcada, va a ser así todo el tiempo. Tienen que demostrarme a mí que quieren jugar y decirme que están presentes», trazó, y contó por qué hoy jugó de arranque Felipe Peña Biafore en lugar de Matías Kranevitter o Rodrigo Villagra, quienes sí figuran en la lista copera: «Mi idea justamente es que necesito algunos días de trabajo de intentar lo que hicieron esta semana, un poco más de tiempo. Kranevitter jugó en los últimos dos partidos, quería aprovechar también el tiempo de entrenamiento. Creía que el que mejor estaba hoy para hacer esa función era Felipe y a los otros trabajarlos para que lleguen bien al partido, en entrenamientos focalizarlos y ganar tiempo para el que juegue el miércoles esté preparado».

TYCSPORTS