El lateral brasileño permanece detenido por un presunto delito de agresión sexual a una joven de 23 años en la discoteca Sutton de Barcelona, el pasado 30 de diciembre. Pidió volver a declarar.
La Justicia de Barcelona definió trasladar al futbolista brasileño Dani Alves a otra prisión más pequeña para «garantizar su seguridad». Desde este lunes, el futbolista se encuentra en el penal de Brians 2, donde no tendrá que compartir ducha con otros internos. Además, contará con un psicólogo y un médico a su disposición.
Alves está detenido por un presunto delito de agresión sexual a una joven de 23 años en la discoteca Sutton de Barcelona, el pasado 30 de diciembre. El futbolista ingresó en el penal de Brians 1 el pasado viernes, tras declarar ante la titular del Juzgado de Instrucción 15 de Barcelona.
Pero para garantizar mejor la seguridad y la convivencia en los módulos donde residen los presos, las autoridades penales catalanas decidieron trasladarlo a la contigua Brians 2.
Pese a que en este centro hay más internos, los módulos en los que residen los presos son más pequeños y tienen una ocupación media de unos 80 reclusos, frente a los alrededor de 200 por módulo de Brians 1.
Las contradicciones en las declaraciones del jugador, que cambió hasta tres veces, hicieron que la magistrada a cargo de la causa dictaminará la prisión preventiva de Alves sin posibilidad de fianza.
Ahora, el exBarcelona pidió a la jueza realizar una nueva declaración en la que daría una versión definitiva de los hechos sucedidos en la discoteca Sutton de Barcelona. Según allegados, Alves estaría analizando el cambio de representante legal, lugar que hasta ahora ocupa Miraida Puente.
Celdas pequeñas y área de aseo privada
El centro de detención al que fue trasladado el jugador no aloja presos con condenas preventivas, sino que los reclusos que allí se encuentran ya tienen condenas firmes. Alves se encuentra en el módulo 13, de condenados por delitos sexuales, de Brians 2.
Respecto a las celdas, en Brians 2 son individuales o para dos personas, pues «uno de los objetivos del centro es mejorar también la calidad de vida de los reclusos y sus condiciones de internamiento»,
En principio, durante los primeros días, estará acompañado de otro interno en su celda, que ejercerá el papel de «preso de confianza», cuya misión es ayudar a superar la sensación de angustia y estrés que puede causar entrar en prisión.
El Brians 2, tiene 14 módulos residenciales y cada uno está dotado de tres plantas y 72 celdas. Además, dispone de otros dos módulos «más para servicios y perfiles determinados» y en cada módulo hay un reservorio «con productos básicos para los internos», consultorio médico, talleres ocupacionales, comedores, peluquería y otros servicios.
