El HMS FORTH navega en aguas de jurisdicción argentina violando la ZOPACAS (Zona de Paz y Cooperación del Atlántico Sur).
El buque patrulla de última generación HMS Forth perteneciente a la flota naval inglesa arribó a Malvinas en la primera quincena del mes de enero del presente año en reemplazo del HMS Clyde.
Lo hizo con el objetivo de realizar operaciones de patrullaje en el Atlántico Sur, patrullaje que está realizando ahora navegando en las aguas jurisdiccionales argentinas de las islas Georgias del Sur.
El Secretario de Malvinas, Antártida, Islas del Atlántico Sur y Asuntos Internacionales, Lic. Andrés Dachary, nuevamente manifestó su repudio a este accionar, dado que “a través de medios periodísticos distintos oficiales británicos dejan en claro la permanente vocación de seguir avanzando en el proceso de militarización del Atlántico Sur.
«Y esto representa de cierta manera, seguir provocando a la República Argentina, generando una amenaza no sólo a la seguridad de toda la provincia y del resto del país sino también del hemisferio por completo, al consolidar una base militar en pleno Atlántico Sur”.
Dachary también subrayó que “es por demás preocupante que esto se dé en estos momentos de emergencia sanitaria que vive el planeta, el cual realmente se encuentra ante una situación global muy compleja.
Los países, más que nunca, están apostando por acciones de cooperación y sin embargo, el Reino Unido utiliza este momento para mostrar su poder militar en el Atlántico Sur, además de dejar entrever el rol que le asigna a las islas del Atlántico Sur como puerta de ingreso a la Antártida”.
Finalmente el Secretario destacó que “esto es una muestra más de cómo el Reino Unido de Gran Bretaña consolida el proceso de militarización en el Atlántico Sur».
«Esto constituye una clara violación a la ZOPACAS (Zona de Paz y Cooperación del Atlántico Sur), que promueve el mantenimiento de la Paz y Seguridad en la Región”, a la vez que dejó en claro que “por nuestra parte vamos a seguir elevando nuestro repudio y reclamo por este acto de militarización ante los distintos organismos nacionales e internacionales que tienen injerencia sobre estas acciones».
«El Gobierno de Tierra del Fuego tiene muy en claro la amenaza que representan estas acciones para la seguridad de la región en su conjunto», concluyó Dachary.
