El sábado, Inglaterra se visitó de fiesta para celebrar la boda del príncipe Harry con Meghan Markle . Desde muy temprano, curiosos e invitados -además de millones de televidentes alrededor del mundo- fueron siguiendo las distintas instancias del casamiento que convirtió al hijo más chico de Lady Di y a la ex protagonista de la serie Suits en marido y mujer.
Luego, siguiendo el protocolo, los flamantes duques de Sussex se tomaron unos minutos en el castillo de Windsor para posar para las fotos oficiales, acompañados por sus familiares directos. La reina Isabel II y el príncipe Felipe se ubicaron en sillas, justo al lado de Harry; detrás de ellos se ubicaron el príncipe Carlos y su esposa, Camilla, duquesa de Cornwall, rodeados por los niños. Por el lado de la novia, en tanto, sólo asistió a la boda su madre, Doria Ragland, que estuvo secundada por William y Kate, duques de Cambridge, y sus dos hijos mayores, George y Charlotte; el pequeño Louis, nacido el pasado 23 de abril, no fue parte del retrato.
