El joven asegura que intentó dejarlo en su hábitat y el animalito se resistió. Hoy marcha junto a sus vecinos.
Años que lo tengo, no hace días… ¿Ahora me lo vienen a quitar?» Así empieza su descargo Ignacio Somacal. El 10 de enero de 2014, tras un incendio en el cerro de Campamento Vespucio, en Salta, se encontró con un mono bebé que le entraba en la palma de la mano.
Desde ese día lo cuidó y alimentó, vivían juntos en su casa y el animal hasta era amigo de sus vecinos. Por una denuncia, la Policía se lo llevó porque su tenencia es ilegal.
Ahora todo se traduce en una polémica. La ley dice que los monos no son animales domésticos y se prohíbe su tenencia, pero Ignacio lo tenía a Martín hace tres años viviendo en un su casa: «El árbol está en la parte de adelante, lo veía todo el mundo al mono, yo vivo al frente de la primaria, salían los chicos y se ponían a jugar con el mono, jamás tuve ningún problema, no es un mono que lo tengo hace una semana”, le explicó a La Gaceta Salta.
Él sabe que no se puede tener de mascota un mono, pero cada vez que intentó liberarlo, Martín se le agarró de la pierna y se resistió. Mientras que muchos vecinos se unieron para ayudarlo a verlo y recuperarlo, otros fueron los que avisaron a la Policía que tenía cautivo a un animal silvestre.
Ignacio convocó a una marcha para intentar revertir la situación y recuperar a Martín. Mientras tanto se espera que el animal sea trasladado a la capital provincial para que la Estación de Fauna Autóctona se encargue de su reinserción a su hábitat natural.
